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Gobierno amplía plazo de contratos de alquiler y limita subida anual

El Gobierno ha anunciado una serie de medidas para ayudar a los inquilinos afectados por la crisis, entre las que destacan la prórroga de seis meses para los contratos de alquiler que finalicen antes del 30 de junio de 2023, así como la limitación máxima del 2% en la subida anual de los alquileres.

Prórroga de seis meses para los contratos de alquiler

La prórroga de seis meses para los contratos de alquiler que finalicen antes del 30 de junio es una medida que busca ayudar a aquellos inquilinos que se han visto afectados por la crisis económica. Esta prórroga es a petición del arrendatario y se extiende hasta el 31 de diciembre.

Esta medida busca evitar el desalojo forzoso y el lanzamiento de hogares vulnerables, ya que el juez tendrá facultad para suspender el lanzamiento si los propietarios tienen más 10 viviendas. Esto significa que aquellos inquilinos con menos recursos económicos no tendrán que preocuparse por perder su hogar durante este periodo.

Limitación máxima del 2% en la subida anual

Otra medida importante es la limitación máxima del 2% en la subida anual de los alquileres. Esto significa que los propietarios no podrán subir el precio del alquiler más allá del 2%, lo cual ayudará a aquellos inquilinos con menores ingresos a mantener su hogar sin tener que preocuparse por un incremento excesivo en sus gastos.

Además, esta medida también beneficiará a aquellos propietarios que quieran mantener sus ingresos estables durante este periodo, ya que les permitirá controlar mejor sus gastos sin tener que preocuparse por un incremento excesivo en sus ingresos.

Suspensión de los desahucios hasta el 30 de junio

Por último, el Gobierno ha decidido suspender hasta el 30 de junio la suspensión de desahucios y lanzamientos para hogares vulnerables. Esto significa que aquellas personas con menores recursos económicos no tendrán que preocuparse por perder su hogar durante este periodo.

Estas medidas son un paso importante para ayudar a aquellas personas afectadas por la crisis económica, ya que les permitirán mantener su hogar sin tener que preocuparse por un incremento excesivo en sus gastos o un desalojo forzoso.