Nadie dijo que elegir a un buen inquilino fuera una tarea fácil. En este artículo, te damos las claves para que el proceso de alquilar tu vivienda no se convierta en una pesadilla y seas capaz de encontrar al arrendatario idóneo para tu inmueble.
Uno de los mayores retos a los que se enfrentan los propietarios de viviendas es elegir a un buen inquilino. Esta decisión puede marcar la diferencia entre una experiencia de alquiler sin problemas y una llena de estrés y preocupaciones. A continuación, repasamos algunos pasos que no pueden faltar durante tu proceso de búsqueda y selección.
4 consejos para elegir al mejor inquilino
Realiza una verificación de la capacidad de pago del inquilino
Una de las primeras cosas que debes hacer como propietario para reducir el riesgo de impago es evaluar la estabilidad financiera del posible inquilino revisando su historial de empleo y verificando sus ingresos.
Solicita una fianza y depósito de garantía
Otra manera de protegerse es solicitando una fianza, que como máximo debe ser de un mes de alquiler, y un depósito de garantía. Este último no podrá exceder los dos meses de renta, pero te permitirá estar mejor cubierto ante posibles impagos o desperfectos.
Habla con el inquilino y con sus referencias
Es importante hacerse una idea de cómo es el posible inquilino y, para ello, son muy útiles las entrevistas personales. Algunas de las preguntas que puedes hacerle son:
- ¿Cuál es tu situación laboral actual y cuáles son tus ingresos mensuales?
- ¿Tienes alguna deuda pendiente?
- ¿Por qué te estás mudando?
- ¿Cuántas personas vivirán en la propiedad?
- ¿Tienes mascotas? Si es así, ¿cuántas y de qué tipo?
- ¿Has sido desalojado alguna vez?
- ¿Tienes alguna duda sobre los términos del contrato de alquiler?
- ¿Cuánto tiempo planeas quedarte?
En este sentido, también te aconsejamos que hables con las referencias proporcionadas por el inquilino para verificar la información ofrecida.
Firma un contrato de alquiler claro y detallado
Por último, es importante que los propietarios firmen un contrato de alquiler claro y completo con el inquilino seleccionado. El documento debe incluir todas las condiciones del alquiler para evitar malentendidos y problemas en el futuro:
- La duración del contrato.
- El precio mensual del alquiler.
- Las condiciones de devolución del depósito de garantía y la fianza.
- Las reglas sobre el mantenimiento de la propiedad.
- Las consecuencias legales de los impagos.
- La actualización anual de la renta de acuerdo con el IPC.
- Las condiciones de finalización anticipada del contrato.
Para más información sobre qué es un contrato de arrendamiento y de qué partes se compone, consulta este artículo.
Como hemos visto, elegir a un buen inquilino requiere de tiempo y esfuerzo, pero bien hecho, es un proceso que puede garantizar una experiencia del alquiler exitosa. Sigue nuestros consejos para seleccionar al mejor candidato y no fracasar en el intento.
