El presidente portugués, Marcelo Rebelo de Sousa, tomó una decisión inesperada al vetar la nueva ley de vivienda, Mais Habitação, y devolverla al Parlamento. Esta acción ha desencadenado una serie de debates y discusiones sobre la eficacia de la oferta de vivienda en el país. El Presidente enfocó sus argumentos en los riesgos de un enfoque demasiado optimista, la lenta burocracia, alquileres forzosos limitados, y la falta de medidas inmediatas para abordar el aumento de los costos de la vivienda.
Rebelo de Sousa ha hecho hincapié en que la ley carece de la credibilidad necesaria para su implementación y movilización a corto plazo. La lenta burocracia y falta de medidas concretas son vistas como obstáculos en la lucha contra la creciente crisis inmobiliaria.
Puntos Principales de la Ambiciosa Ley de Vivienda
La nueva ley de vivienda tiene como objetivo aumentar la oferta de vivienda, fortalecer el papel del Estado en la provisión de vivienda y proporcionar incentivos públicos al sector privado. La implementación de alquileres forzosos de propiedades privadas desocupadas, limitaciones a los alquileres a corto plazo, y colaboraciones cooperativas y alquileres asequibles son parte de este esfuerzo.
Además, la ley planea implementar medidas transitorias, incluidas limitaciones al precio del alquiler, durante el período de implementación de la ley. Esta propuesta ambiciosa busca dar respuesta a la creciente demanda y presión en el mercado inmobiliario portugués.
Las Críticas y Preocupaciones de Rebelo de Sousa
Las dudas del Presidente sobre la nueva ley de vivienda son contundentes y están bien fundamentadas. Criticó la ley por no tener medidas inmediatas para abordar la carga financiera de muchas familias y destacó la ausencia de consenso entre los partidos políticos. Las deficiencias en los alquileres forzosos, las regulaciones municipales de alojamiento y la falta de consenso fueron señaladas como problemas clave.
El Presidente insistió en que una reforma de esta magnitud debería haber tenido un apoyo significativo en el Parlamento. De lo contrario, se podría enfrentar un retraso de dos a dos años y medio, lo cual es inaceptable en el clima inmobiliario actual.
El Veto de Rebelo de Sousa y Acciones Futuras
El ejercicio del derecho de veto por parte del Presidente no es un evento común en Portugal, y esta es la 28ª vez que se utiliza. El Partido Socialista, que presentó la ley, prevé volver a aprobarla en el Parlamento a pesar del veto. Sin embargo, otros partidos, tanto de izquierda como de derecha, apoyan la decisión de Rebelo de Sousa.
El veto político se basó en la falta de consenso partidario y la ineficiencia de las medidas implementadas en la ley. La tensión entre el Ejecutivo y la Asamblea de la República puede marcar un punto de inflexión en la política de vivienda en Portugal.
Limitación del Aumento de Alquiler y Fin de los ‘Golden Visa’
Además de la controvertida ley, hay otros desarrollos notables en el mercado inmobiliario portugués. La futura ‘Ley de Vivienda portuguesa’ busca limitar el incremento de los nuevos arrendamientos al 2% y cambiar las dinámicas de inversión en viviendas.
Adicionalmente, el famoso programa de ‘golden visa’ para la inversión inmobiliaria en Portugal llega a su fin. Esta medida ha atraído a muchos extranjeros por la calidad de vida y clima del país, y su conclusión puede tener un impacto significativo en el atractivo de Portugal como destino de inversión inmobiliaria.
